Segundo clasicismo y período helenístico
El segundo clasicismo primeramitaddelsigloIV−323a.C. humanizó la escultura griega. El naturalismo avanzó enormemente, permitiendo expresar dramatismo y emociones, mientras que la belleza masculina se volvió más sensual y graciosa, menos heroica.
Praxíteles creó dioses llenos de gracia con su famosa Afrodita de Cnido, Escopas prefirió el dramatismo con su Ménade furiosa, y Lisipo estableció un nuevo canon de 8 cabezas más esbelto. Por primera vez se valoró plenamente la belleza del cuerpo femenino.
El período helenístico 323−30a.C. rompió todos los moldes anteriores. Predominó el naturalismo absoluto, incorporando temas cotidianos, representaciones de la vejez, la infancia e incluso deformidades. Los retratos se volvieron psicológicamente profundos.
Las escuelas especializadas crearon obras maestras: Pérgamo produjo el dramático Gálata moribundo, Rodas el espectacular Laoconte y sus hijos, Alejandría exploró lo cotidiano con la Enana bailando, y Atenas mantuvo la tradición clásica con la Venus de Milo.
Evolución clave: Del inmovilismo arcaico al dinamismo helenístico, la escultura griega recorrió un camino de casi mil años de innovación constante.