Contexto Histórico: Guerra y Crisis Política
La Guerra de la Independencia contra Francia (1808-1814) transformó radicalmente el panorama político español. Todo comenzó con las Abdicaciones de Bayona, donde Fernando VII cedió la corona a su padre, Carlos IV, quien a su vez la entregó a Napoleón. Este hecho provocó el estallido de la guerra entre patriotas y afrancesados.
El vacío de poder resultante fue aprovechado por los liberales para formar juntas locales que evolucionaron hasta la Junta Central Suprema y, finalmente, al Consejo de Regencia, que organizaría las Cortes en Cádiz. Esta ciudad, no invadida durante la guerra y con intensa actividad mercantil, se convirtió en el escenario ideal para el debate político.
Las Cortes de Cádiz reunieron diversas ideologías: absolutistas dispuestos a aceptar leves reformas, liberales moderados que apoyaban un sistema constitucional conservador, y exaltados partidarios de cambios radicales. A pesar de sus diferencias, consensuaron la Constitución de 1812 (conocida como "La Pepa"), que establecía la soberanía nacional, el sufragio universal masculino y la igualdad ante la ley.
El regreso de Fernando VII tras el Tratado de Valençay (diciembre 1813) supuso un giro inesperado. En lugar de jurar la Constitución, el monarca optó por restaurar el absolutismo con el Decreto de Valencia del 4 de mayo de 1814, derogando toda la obra legislativa de las Cortes.
💡 Recuerda: La Constitución de 1812, aunque breve en su aplicación, sentó las bases del liberalismo español y se convirtió en un símbolo de lucha contra el absolutismo durante todo el siglo XIX.