El Movimiento Obrero y los Inicios del PSOE en España
El nacimiento del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) marcó un momento crucial en la historia del movimiento obrero español. En 1879, la Nueva Federación Madrileña se transformó en la Agrupación Socialista Madrileña bajo el liderazgo de Pablo Iglesias, estableciendo los cimientos de lo que se convertiría en el PSOE. Este partido emergió con una clara orientación marxista y obrerista, defendiendo la necesidad de una revolución social para transformar las condiciones de vida de la clase trabajadora.
El programa reformista del PSOE incluía demandas fundamentales como el derecho de asociación, reunión y manifestación, además del sufragio universal. En el ámbito laboral, sus principales reivindicaciones se centraban en la reducción de la jornada laboral y la eliminación del trabajo infantil. Para fortalecer su presencia en el mundo laboral, los socialistas impulsaron la creación de la Unión General de Trabajadores (UGT), un sindicato de masas que buscaba mejorar las condiciones laborales de los trabajadores.
Destacado: La Comisión de Reformas Sociales fue una respuesta institucional a las demandas obreras, marcando el inicio de la legislación laboral moderna en España.
Durante la Restauración, el gobierno reconoció la necesidad de regular las relaciones económicas y laborales, lo que llevó a la creación de la Comisión de Reformas Sociales. Esta institución tenía como objetivo principal investigar las condiciones de la clase obrera y promover una legislación que regulara las condiciones de trabajo. Se aprobaron importantes leyes que incluían la regulación de trabajos peligrosos para niños, la creación de asilos para trabajadores inválidos y la construcción de barriadas obreras, aunque muchas de estas medidas no se implementaron hasta principios del siglo XX.