Napoleón: De Héroe Revolucionario a Emperador
Cuando Francia necesitaba estabilidad tras años de caos, apareció Napoleón Bonaparte. Este genial militar aprovechó la situación en 1799 para dar un golpe de estado y crear el Consulado, con apoyo de la burguesía que quería orden y prosperidad.
Su ascenso fue meteórico: en 1802 se proclamó cónsul vitalicio y en 1804 se coronó emperador de Francia. Aunque gobernó de forma autoritaria, consolidó las conquistas revolucionarias más importantes y modernizó Francia por completo.
Sus reformas transformaron el país: reorganizó la administración creando los prefectos (representantes del Estado), estableció un sistema educativo estatal centralizado, reformó la Hacienda pública y fundó el Banco de Francia. También firmó el Concordato de 1801 con el Papa, pacificando las relaciones con la Iglesia.
💡 Clave para el examen: Napoleón mantuvo los logros de la Revolución (igualdad, meritocracia) pero eliminó las libertades políticas, creando un modelo que muchos dictadores copiarían después.