Ciencia y arte islámico
La civilización islámica vivió su edad de oro entre los siglos VIII y XII. ¿El secreto de su éxito? Todos hablaban árabe, lo que permitía intercambiar conocimientos fácilmente por todo el territorio musulmán.
Los musulmanes fueron auténticos genios en matemáticas, medicina, cirugía y astronomía. También desarrollaron tecnologías prácticas súper útiles como sistemas de riego, fabricación de papel y perfumes.
El arte islámico tenía una limitación importante: no podían representar imágenes sagradas. Por eso se centraron en la arquitectura (arcos, cúpulas, decoración geométrica) y las artes decorativas como cerámica y miniaturas.
💡 Patrimonio español: La Mezquita de Córdoba, la Alhambra de Granada, la Giralda de Sevilla y la Aljafería de Zaragoza son joyas que todavía podemos disfrutar.
El esquema resumen te muestra claramente cómo el Islam nació en Arabia, se expandió por medio mundo, y en la Península Ibérica creó Al-Andalus con sus diferentes períodos políticos, una sociedad compleja y una economía próspera.