Los Reinos Cristianos y la Repoblación
Mientras Al-Ándalus dominaba el sur, los reinos cristianos se organizaban en el norte. Pelayo fundó el reino de Asturias, que evolucionó al reino de León con Ordoño II. Castilla se independizó con Fernando I, y más tarde Fernando III unió ambos reinos en la Corona de Castilla.
En el este, Iñigo Arista creó el reino de Navarra, mientras que Aznar Galíndez fundó el condado de Aragón. Sancho III el Mayor expandió Navarra enormemente, y Ramón Berenguer IV formó la Corona de Aragón.
La repoblación fue clave para la Reconquista. Hasta el siglo XI, los reyes ofrecían cartas pueblas o fueros (documentos con privilegios) para atraer población a las tierras conquistadas. A partir del siglo XI, dividían las tierras en grandes latifundios que entregaban a nobles, la Iglesia o las órdenes militares.
¡Truco de memoria! Las órdenes militares eran monjes-soldados que combinaban vida religiosa con actividad militar para defender las fronteras cristianas.