Peróxidos: Qué son y cómo se forman
¿Has oído hablar del agua oxigenada? Pues es un tipo de peróxido, y estos compuestos están más cerca de tu vida diaria de lo que imaginas. Los peróxidos se forman cuando el oxígeno actúa con la fórmula especial (O₂)²⁻.
Este grupo de oxígeno tiene una característica muy particular: se combina principalmente con metales alcalinos (como el sodio) y metales alcalinotérreos (como el calcio). Piénsalo como si el oxígeno fuera más selectivo con sus "amigos" químicos.
Aunque normalmente estos metales son los favoritos, hay excepciones interesantes. También pueden formarse peróxidos con metales que tengan valencia iónica +1 o +2. Un ejemplo perfecto es el hierro, que normalmente tiene valencias +2 y +3, pero para formar peróxidos usa su valencia +2.
Truco clave: Los peróxidos siempre contienen el grupo (O₂)²⁻, no confundas esto con óxidos normales que solo tienen O²⁻.
Ejemplos importantes que debes conocer:
- FeO₂: peróxido ferroso (también llamado peróxido de hierro II)
- Rb₂O₂: peróxido de rubidio
- CuO₂: peróxido cúprico (también llamado peróxido de cobre II)