Qué son las fuerzas
Imagínate que estás moldeando plastilina o empujando tu bici cuesta arriba. En ambos casos estás aplicando una fuerza, que básicamente es cualquier cosa capaz de cambiar el movimiento de un objeto o deformarlo.
Las fuerzas pueden hacer tres cosas principales: poner en movimiento algo que está quieto (como cuando una locomotora mueve un tren), parar algo que se mueve (como un portero parando un balón), o cambiar la forma de un objeto (como tus manos moldeando barro).
La fuerza siempre surge de la interacción entre dos cuerpos y se mide en Newtons usando un aparato llamado dinamómetro. Como es una magnitud vectorial, necesitas conocer cuatro características: su intensidad (módulo), dónde se aplica, en qué dirección va y hacia qué sentido.
💡 Recuerda: Los dinamómetros funcionan gracias a la Ley de Hooke, que dice que la fuerza aplicada a un muelle es proporcional a su alargamiento F=k⋅Δl. ¡Pero cuidado! Si estiras demasiado el muelle, se rompe y ya no funciona igual.