La formulación inorgánica y la nomenclatura inorgánica son fundamentales para entender cómo se nombran y escriben los compuestos químicos. Los compuestos inorgánicos siguen reglas específicas establecidas por la IUPAC (Unión Internacional de Química Pura y Aplicada) que permiten identificar sus componentes y estructura. La nomenclatura tradicional, la nomenclatura stock y la nomenclatura sistemática son los tres sistemas principales para nombrar estos compuestos.
Los óxidos son compuestos binarios formados por oxígeno y otro elemento, siendo uno de los grupos más importantes en química inorgánica. Los óxidos ácidos se forman cuando el oxígeno se combina con un no metal, mientras que los óxidos básicos resultan de la combinación con metales. Por ejemplo, cuando el azufre reacciona con oxígeno forma dióxido de azufre (SO₂), un óxido ácido común. En la vida cotidiana, los óxidos ácidos tienen múltiples aplicaciones: el CO₂ en bebidas carbonatadas, el SO₂ como conservante en alimentos, y el NO₂ en procesos industriales.
Para dominar la formulación inorgánica, es esencial practicar con ejercicios resueltos que cubran diferentes tipos de compuestos. La escritura de fórmulas químicas requiere entender la valencia de los elementos, el estado de oxidación y las reglas de nomenclatura. Los estudiantes pueden encontrar recursos útiles en guías de formulación inorgánica PDF que incluyen tablas de valencias, ejemplos detallados y ejercicios resueltos. La práctica regular con estos materiales ayuda a desarrollar la habilidad para nombrar y escribir correctamente las fórmulas de compuestos inorgánicos.