Crítica a la democracia y concepto de justicia
Platón identificaba dos errores fundamentales en la democracia ateniense que vivió:
Primero, los cargos políticos los ejercían ciudadanos sin formación específica, seleccionados por sorteo o elección, cuando solo una minoría capaz de conocer las Ideas podía gobernar con sabiduría.
Segundo, las decisiones se tomaban por mayoría, lo que permitía que una ciudadanía poco formada fuera manipulada por oradores hábiles, convirtiendo la democracia en demagogía.
Justicia en el Estado: Un Estado es justo cuando cada clase social ejerce su función propia sin interferir en las tareas de las otras, respetando la jerarquía natural.
Justicia en el individuo: Una persona es justa cuando cada parte de su alma cumple su función - la racional dirige, la irascible actúa con coraje según la razón, y la concupiscible practica moderación.
Aplicación actual: ¿Te suena familiar la crítica de Platón sobre políticos sin formación y ciudadanos manipulados por la demagogia?
La felicidad (eudemonia) tanto del Estado como del individuo resulta de esta armonía y correcto funcionamiento de cada parte. No beneficia a una minoría, sino a todos los ciudadanos cuando cada uno encuentra y ejerce su función natural.