Del mito al logos: el gran salto de la humanidad
Antes de que existiera la filosofía, las personas explicaban el mundo a través de mitos: relatos con dioses y héroes que se transmitían de boca en boca. Estos mitos podían ser cosmogónicos (sobre cómo se formó el mundo), teogónicos (historias de dioses), etiológicos (origen de las cosas) o escatológicos (sobre el fin del mundo).
El gran cambio llegó con el logos: explicaciones basadas en la razón y los argumentos. Este paso del mito al logos marcó el nacimiento tanto de la ciencia como de la filosofía, y supuso una revolución en la forma de pensar.
Los primeros filósofos griegos buscaban el arjé, es decir, el origen o principio fundamental de la naturaleza. Ya no se conformaban con "porque los dioses lo quisieron", sino que querían entender las causas reales.
La filosofía se divide en teórica (para conocer la realidad) y práctica (para tomar mejores decisiones en nuestras vidas). Mientras que la ciencia usa evidencia empírica y la religión se basa en la fe, la filosofía emplea la argumentación lógica y racional como su herramienta principal.
🎯 Recuerda: La filosofía no busca respuestas fáciles, sino las mejores respuestas posibles usando solo la razón.