Platón: El Filósofo de las Ideas
La muerte injusta de Sócrates marcó profundamente a Platón y le hizo rechazar el relativismo de los sofistas. Aunque venía de una familia aristocrática, prefirió dedicarse a la filosofía para crear un modelo de sociedad perfecta.
Sus principales influencias fueron diversas: Sócrates le enseñó la mayéutica (el arte de hacer preguntas para llegar a la verdad), los sofistas le mostraron lo que había que combatir, Pitágoras le transmitió la importancia de las matemáticas, Heráclito le explicó que el mundo sensible cambia constantemente, y Parménides le demostró que solo lo eterno puede ser conocido racionalmente.
Para Platón, la realidad se divide en dos mundos completamente diferentes (dualismo ontológico). El mundo sensible es donde vivimos: imperfecto, material y siempre cambiante, donde las cosas nacen y mueren. El mundo de las ideas es eterno, inmaterial e inmutable, donde están las formas perfectas de todo lo que existe.
💡 Piénsalo así: Si ves muchos perros diferentes, todos participan de la "idea perfecta de perro" que existe en el mundo de las ideas.
La teoría de la participación explica que nuestro mundo sensible existe porque imita al mundo de las ideas mediante copias. Algunas copias son más parecidas a la idea perfecta que otras, pero nunca llegan a la perfección absoluta.