Santo Tomás de Aquino: La Síntesis Perfecta
Santo Tomás logró algo increíble: unir a Aristóteles con el cristianismo. Adoptó la metafísica hilemórfica aristotélica pero la adaptó a la fe cristiana. Su gran aportación son las cinco vías para demostrar la existencia de Dios: movimiento, causalidad eficiente, contingencia, grados de perfección y finalidad.
Su antropología es clara: el ser humano tiene cuerpo mortal y alma inmortal con tres facultades (vegetativa, sensitiva y racional). Distingue entre seres contingentes (como nosotros) y Dios, que es necesario. Solo en Dios la esencia implica la existencia.
En el problema fe-razón, Santo Tomás establece una distinción genial: hay verdades de fe, verdades de razón y preámbulos de la fe (verdades que se pueden demostrar racionalmente). La fe es el criterio último, pero la razón tiene su espacio propio.
Su ética sigue siendo eudaemonista, pero establece tres leyes: eterna (plan divino), natural (aplicada a humanos) y positiva (leyes humanas). Las leyes humanas que contradigan la ley natural no son válidas.
Políticamente, propone una división de poderes: el gobierno se ocupa de lo terrenal y la Iglesia de lo espiritual, aunque la Iglesia tiene primacía porque se ocupa de la salvación del alma.
¡Clave para exámenes! Recuerda las cinco vías de Santo Tomás - son fundamentales para entender su filosofía.