Los enunciados son unidades mínimas de comunicación que transmiten un mensaje completo y tienen sentido por sí mismos. La clasificación de enunciados oracionales y no oracionales es fundamental para entender cómo se estructura el lenguaje. Los enunciados oracionales contienen un verbo conjugado y expresan acciones o estados, mientras que los no oracionales carecen de verbo pero igualmente comunican significado completo.
Las modalidades de los enunciados según la actitud del emisor nos permiten expresar diferentes intenciones comunicativas. Pueden ser enunciados enunciativos cuando informan de manera objetiva, interrogativos cuando plantean preguntas, exclamativos al expresar emociones intensas, imperativos para dar órdenes o instrucciones, dubitativos cuando expresan duda o posibilidad, y desiderativos cuando manifiestan deseos. Cada modalidad tiene sus propias marcas lingüísticas y entonación característica que ayudan a identificarla.
Las categorías gramaticales en los enunciados son las diferentes clases de palabras que podemos encontrar, como sustantivos, adjetivos, verbos, adverbios, determinantes, pronombres, preposiciones y conjunciones. Cada categoría cumple una función específica dentro del enunciado: los sustantivos nombran entidades, los adjetivos describen cualidades, los verbos expresan acciones o estados, los adverbios modifican verbos, adjetivos u otros adverbios, los determinantes precisan el significado de los sustantivos, los pronombres sustituyen a otras palabras, las preposiciones relacionan elementos y las conjunciones conectan palabras u oraciones. La comprensión de estas categorías es esencial para construir enunciados correctos y coherentes.