La teoría celular es uno de los principios fundamentales de la biología moderna que explica la estructura y organización de todos los seres vivos.
Los científicos Schleiden y Schwann establecieron las bases de la teoría celular al proponer que todos los organismos están compuestos por células y que éstas son la unidad básica de la vida. Esta teoría se desarrolló gracias a las observaciones pioneras de Robert Hooke, quien en 1665 observó por primera vez células vegetales muertas utilizando un microscopio rudimentario. Los postulados principales establecen que todo ser vivo está formado por células, que éstas son las unidades básicas estructurales y funcionales de la vida, y que toda célula proviene de otra célula preexistente.
Las células están compuestas por diferentes tipos de biomoléculas, que pueden clasificarse en orgánicas e inorgánicas. Las biomoléculas inorgánicas incluyen el agua, las sales minerales y los gases, mientras que las biomoléculas orgánicas comprenden los carbohidratos, lípidos, proteínas y ácidos nucleicos. Cada tipo cumple funciones específicas: las proteínas tienen funciones estructurales y reguladoras, los carbohidratos proporcionan energía, los lípidos forman membranas celulares y almacenan energía, y los ácidos nucleicos contienen la información genética. La comprensión de la biología y geología a nivel celular es fundamental para entender los procesos vitales y la evolución de los organismos. Los estudiantes de 4 ESO deben dominar estos conceptos ya que constituyen la base para comprender temas más complejos en biología.