Bioelementos y Biomoléculas: Fundamentos de la Vida
Los bioelementos son elementos químicos fundamentales para los seres vivos y se clasifican según su abundancia. Los primarios (CHONPS) son los más abundantes: el Carbono forma cuatro enlaces covalentes creando diversidad molecular; el Hidrógeno y Oxígeno son esenciales para la respiración celular; mientras que Nitrógeno, Azufre y Fósforo participan en estructuras como ácidos nucleicos y proteínas.
Los bioelementos secundarios (Na, K, Ca, Mg, Cl) tienen funciones específicas: el Calcio forma huesos y permite la contracción muscular; el Magnesio es componente de la clorofila; y el grupo PCS mantiene el potencial de membrana. Los oligoelementos (Fe, Zn, Mn, F, Cu) están presentes en cantidades mínimas pero son vitales—el Hierro transporta oxígeno, mientras que elementos como el Yodo forman hormonas tiroideas.
Las sales minerales solubles cumplen dos funciones críticas: regulan el pH mediante sistemas tampón (manteniendo el pH neutro de 7) y controlan el equilibrio osmótico a través de membranas semipermeables. Cuando las concentraciones salinas difieren a ambos lados de una membrana, el agua se mueve generando presión osmótica, y el medio debe ser isotónico para mantener células turgentes.
💡 ¿Sabías que? El agua representa el 63% de los seres vivos y es esencial gracias a sus propiedades únicas como su capacidad disolvente, tensión superficial y puentes de hidrógeno. Estas características permiten que exista vida tanto bajo el hielo (al flotar) como sobre el agua.
Las biomoléculas se dividen en inorgánicas (presentes en la materia inerte y seres vivos) y orgánicas (exclusivas de los seres vivos). El agua, como biomolécula inorgánica fundamental, tiene naturaleza dipolar debido a la electronegatividad del oxígeno, permitiendo la formación de puentes de hidrógeno que explican sus extraordinarias propiedades biológicas.