La Composición de la Materia Viva
Imagínate que todos los seres vivos somos como coches diferentes pero con el mismo motor básico. Eso es exactamente lo que pasa: tenemos composición química similar, nos organizamos a partir de células y realizamos las mismas funciones vitales (nutrición, relación y reproducción).
Los bioelementos son los ladrillos químicos que nos forman. Los primarios (C, H, O, N, P, S) son los protagonistas principales porque forman enlaces súper estables y son fáciles de conseguir. Los secundarios (Mg, Ca, Cl, K, Na) mantienen el equilibrio interno y hacen que funcionen nuestros músculos. Los oligoelementos (Fe, Cu, I, Li) están en cantidades mínimas pero son imprescindibles.
Las biomoléculas se dividen en dos equipos: las orgánicas (exclusivas de los vivos como glúcidos, lípidos, proteínas y ácidos nucleicos) y las inorgánicas (que también están en cosas no vivas). La isomería es cuando dos moléculas tienen la misma fórmula pero diferente estructura, como gemelos que se parecen pero no son iguales.
💡 Dato curioso: Tu cuerpo está hecho de los mismos elementos que las estrellas, solo que organizados de forma diferente.