La Replicación del ADN
El ADN tiene una habilidad increíble: puede hacer copias exactas de sí mismo. Este proceso, llamado replicación, es fundamental para que tus células se dividan y para que pases tu información genética a tus hijos.
La replicación es semiconservativa, lo que significa que cada nueva molécula de ADN conserva una hebra original y tiene una hebra nueva. Es como si fuera un molde: cada hebra original sirve de guía para crear su hebra complementaria.
Durante la replicación se forma una burbuja de replicación con dos horquillas donde trabajan diferentes enzimas especializadas. La helicasa abre la doble hélice, la ADN polimerasa añade los nucleótidos nuevos, y la ligasa une los fragmentos. Es un trabajo en equipo perfectamente coordinado.
El proceso no es igual en ambas hebras: una se copia de forma continua (hebra adelantada) y la otra en pequeños fragmentos llamados fragmentos de Okazaki (hebra retrasada). Esto ocurre porque la ADN polimerasa solo puede trabajar en una dirección específica.
💡 Dato curioso: En eucariotas hay unos 30.000 puntos donde comienza la replicación, mientras que en bacterias solo hay uno. ¡Por eso nuestras células tardan más en replicarse!