Estructura: las piezas del rompecabezas enzimático
Estructuralmente, las enzimas pueden ser de dos tipos: las estrictamente proteicas (solo proteína) o las holoenzimas, que son como un equipo formado por una parte proteica (la apoenzima) y un ayudante (el cofactor).
Los cofactores pueden ser orgánicos como las coenzimas ATP,NAD+,FADqueseguramentereconocesdeotrasclases o iones metálicos como el magnesio o zinc que actúan como asistentes químicos.
También existen las isoenzimas, que son como versiones especializadas de la misma enzima para diferentes tejidos. Es como tener diferentes herramientas para el mismo trabajo según dónde lo hagas.
Las coenzimas merecen mención especial porque son los transportistas moleculares: se enganchan temporalmente a las enzimas y mueven grupos químicos de un lado a otro. Pueden ser de oxidación-reducción (mueven protones y electrones) o de transferencia (transportan grupos específicos como fosfatos).
💡 Piénsalo así: Las coenzimas son como los camiones de reparto que llevan paquetes químicos entre diferentes reacciones.