Tórax Óseo y Costillas: Tu Caja Protectora
Tu tórax óseo es como una jaula protectora para órganos vitales como el corazón y los pulmones. Esta estructura tiene una forma de cono invertido y está formada por las costillas, las vértebras torácicas y el esternón.
Las costillas son huesos planos y curvados que se clasifican en dos grupos principales. Las 7 costillas verdaderas se conectan directamente al esternón a través de sus cartílagos, mientras que las 5 costillas falsas incluyen 3 que se unen indirectamente al esternón y 2 costillas flotantes que solo se conectan a las vértebras.
El esternón es ese hueso plano en el centro de tu pecho que tiene tres partes: el manubrio (parte superior donde se conectan las clavículas), el cuerpo (parte central más larga) y el apéndice xifoides (la punta inferior).
Los espacios intercostales entre las costillas están llenos de músculos que te ayudan a respirar, haciendo que tu caja torácica se expanda y contraiga como un acordeón.
💡 Tip de anatomía: Puedes palpar fácilmente la 7ª vértebra cervical (prominente) en la base de tu cuello, ¡es la primera que sobresale!