Crecimiento y Tipos de Huesos
Tu crecimiento en altura se debe a la osificación, un proceso donde el cartílago se convierte en hueso. Hasta los 20-25 años, tus huesos siguen creciendo gracias al cartílago de crecimiento que está entre las partes del hueso.
El momento de máximo crecimiento ocurre entre los 11-13 años en las chicas y 12-14 años en los chicos. Cuando aparece la línea epifisaria, significa que ya has terminado de crecer en altura.
Según su forma, tienes cinco tipos de huesos: largos (como el fémur), cortos (como los del talón), planos (como la escápula), irregulares (como las vértebras) y sesamoideos (como la rótula).
Los huesos largos tienen partes específicas: la diáfisis (parte central), las epífisis (extremos), el cartílago articular (superficie lisa para el movimiento), el periostio (membrana que recubre el hueso) y la médula ósea (interior del hueso).
💡 Recuerda: Las articulaciones conectan tus huesos y pueden ser inmóviles (suturas del cráneo), semimóviles (discos intervertebrales) o móviles (cadera, codo).
Las articulaciones móviles o sinoviales son las que te permiten moverte libremente, mientras que las fibrosas y cartilaginosas ofrecen más estabilidad que movimiento.